miércoles, 30 de mayo de 2007

El mail que pudo haber sido y no fue...

Pues yo iba a poner otro post. Nada que ver, lo típico, hablar de lo bien que me lo he pasado el finde, de lo bien que está irse a cenar con tus amigos, del calor que hace en Murcia, de lo feas que parecen mi ciudad natal y mi ciudad adoptiva cuando se comparan con Lisboa, de lo cansado que está uno después de un fin de semana así, del miedo que se pasa sobrevolando Lisboa, que casi se rozan los tejados de los edificios... Incluso iba a hablar de que esta mañana había visto por vez primera en mi vida a un tío afeitándose con una mano mientras conducía con la otra ¡y que, encima, me han dicho que es más común de lo que parece! Me quería excusar por no poner fotos por el momento, porque se me ha roto la cámara. Pensaba contar que he traído al laboratorio mazapanes Doña Jimena (Gran Surtido) y que les están gustando. Podría contar que le he enviado un mail a una paya de la UMU que se dedica a enviar los comunicados de la AVT a la lista de anuncios, a pesar de que la gente la pone a caldo...
Pero todo eso ha quedado completamente eclipsado por ésto. Siento que sea un link a El Mundo, pero hay que leerlo tó pa estar bien informao...
viernes, 25 de mayo de 2007

Can't take my eyes off you


Me he pasado toda la semana esperando que llegara este día. Hoy me toca a mí coger dos aviones, hacer escala en la T4, que me recojan en el aeropuerto. Ver a mis amigos, ver al Sr. Skyzos...

Quería pasarme el fin de semana entero mirándote hasta cansarme, besándote hasta gastarte, abrazándote hasta desinflarte... pero el domingo estoy de suplente en mi mesa electoral (¡¡hay que joderse, puta democracia!!). Espero poder escabullirme, ¿a la playa? ¿a comer por ahí? ¿a tomar café? ¿a emborracharme?.

En cualquier caso... Hasta el martes no volveré por aquí, espero que tengáis un buen finde, yo tendré un buen puente. Os dejo esta canción que a mí me da tan buen rollo y que parece escrita para que se la cante a mi Churri este finde. Por cierto, que el video tampoco tiene ni pizca de desperdicio (empezando por el nombre de la pinícula).


PD: ya me lo advirtió mi Churri, que si Blogger se pone farruco no te deja postear. O te borra los posts. Y yo no le creí...

miércoles, 23 de mayo de 2007

Una de anatomía lisboeta: O PONTE 25 DE ABRIL

Una de las cosas que más impresiona cuando llegas a Lisboa es la foto de la entrada. Llegar en coche desde España guarda una maravillosa sorpresa al final para el viaje. La ciudad se encuentra en el margen izquierdo (norte) del Tajo (aquí Tejo, o en inglés, Tagus, como una de sus cervejas). Así, la entrada en coche a la ciudad es, impepinablemente, a través de uno de los puentes: ya sea el Vasco da Gama o el 25 de Abril. Si hay que elegir, no hay color: O PONTE 25 DE ABRIL.

Si nos ponemos técnicos (gracias a la Wikipedia), podríamos decir que tiene más de dos km de largo, hasta 190 m de altura sobre el nivel del Tejo, y otros 79 escondidos bajo sus aguas. Pero lo imponente es que la vía discurre a 70 m de altura, de modo que, literalmente, entras a Lisboa viéndola desde la altura, un espectáculo que no tiene precio. Y no lo tiene porque esta ciudad de geografía cuasi-alpina, en la que sus ciudadanos tienen algo de complejo de cabras (y unas piertas y unos gluteos bien entrenados), escala las colinas que antes la protegían. De este modo se ven los diferentes niveles de construcción como en un ejercicio de perspectiva. Se ve también el Castelo de S. Jorge y, vaya por dior, un cementerio que está un poquito demasiado metido en la ciudad.

Los portugueses tuvieron la idea de construir el puente bastante pronto, en 1876, pero no se decidieron a hacerlo realidad hasta 1958. Es curioso, porque justo fue a construirse durante la dictadura de Salazar, que digo yo que este hombre no se daría más prisa en construirlo porque, total, no había elecciones a la vista. (Si las hubiera habido, el puente sería desmontable, no llegaría hasta Lisboa, se quedaría a mitad de camino en el Tajo, para poder disfrutar de la vista, y habría sido inaugurado a bombo y platillo dos meses antes de las elecciones, ¡otro gallo habría cantado a estos lisboetas!).

Total, que entre 1962 y 1966, la Steel Export Company, (de los USA de toda la vida) puso patas arriba un trocico de Lisboa para mayor gloria del país. (En la Wikipedia no dicen si la gente se quejó tanto como en Madrid con las obras de la M30, pero me da a mí que no, que esta gente vive menos estresada).

Hasta 1974 se llamó Ponte de Salazar, pero tras la Revolución de los Claveles, ya no procedía el tema. (Algo similar pasa en España-piel de toro-, con la diferencia de que nosotros hemos tardado taitantos años en acabar con los recuerdos del Tito Paco, mientras que aquí se ventilaron antes los del Sr. Salazar, pero claro, nosotros siempre hemos sido muy carpetovetónicos).

En su época, este puente fue el quinto mayor puente suspendido del mundo, el mayor fuera de los Estados Unidos. Cuarenta años más tarde, aún ocupa el 17º lugar mundial.

Mi barrio, Alcântara, es el que recibe al puente en el margen norte. Hasta tal punto afecta esto a la fisonomía del barrio, que está partido en dos por las vías de acceso. Pasar andando bajo Él da hasta un poco de mal rollo. Yo no he podido evitar preguntarme qué pasaría si un tornillo se soltara, o si un coche se despeñara. Por eso cuando estoy cerca aprieto el paso, me alejo y me pongo a cubierto. Eso sí, cuando creo que estoy a salvo, no puedo evitar mirar atrás para apreciar su imponencia.

Pero a pesar de su grandeza, la vida sigue a su alrededor. La vida del barrio cambió en los años 60. Imaginad que construyen un puente sobre vuestra casa. Imaginad que nunca entrara el sol por vuestras ventanas, que escucharas los coches en la autovía las 24 horas del día, que tus macetas se secaran, que tus paredes se agrietaran, que se desconcharan, que tu casa palideciera, enferma. Imaginad vivir debajo del Ponte. Pues aún hoy, 40 años después, quedan casas debajo del Ponte 25 de abril. Y aún hoy las habita gente.

A mí esta última imagen me causa una mezcla de sensaciones difícil de explicar...

Y no, yo no vivo en la casa "a la sombra".

martes, 22 de mayo de 2007

Decepción investigadora...

No os podéis imaginar el efecto que tiene en mí este anuncio:


¡No, no va por ahí la cosa pervertid@s! Tantos años de tesis dedicados al estudio del metabolismo de la L-gatinina, mis mejores años, mi juventud (divino tesoro), mis noches de sueño y mis ojeras... ¡Y mis abdominales y pectorales no son como los del tío del anuncio! Este mundo está lleno de injusticias y he aquí una de ellas.

Shepperdsen dixit.

PD 1: lo que no entiendo es a qué viene esta moda/manía de echarle cosas al agua. El agua era inodora, incolora e insípida en mis libros de la EGB. ¿Qué dirá ahora en los de la Reforma? ¿El agua embotellada puede tener fibra, vitaminas, L-gatinina, sabor a pera, antiojeras y/o viagra en función de la fuente seleccionada?

PD 2: habrá quien piense que este post no es ni más ni menos que una excusa para poner la foto. Puede ser, todo puede ser...

PD 3: esta mañana, viniendo hacia aquí he descubierto la versión femenina del anuncio... pero no hay foto.
domingo, 20 de mayo de 2007

Not Crazy Anymore

Hoy pensaba escribir un post ligero, insulso, anodino y fofo, pero paseando por la web (muy very boring weekend in Lisbon, necesito hacer amig@s pero ya!) me he encontrado con algo que merece mucho más la pena. Lo he encontrado aquí, en la web de LucLatulippe. Espero que os interese tanto como a mí.

NOT CRAZY ANYMORE

Today marks the day, only seventeen years ago, when I was no longer considered mentally ill. And I didn’t even know it at the time.

It was on May 17, 1990, that the World Health Organization removed Homosexuality from their International Classification of Diseases list. Until that ruling, I and all the hundreds of millions of other queers were technically considered to be mentally ill. According to the International Day Against Homophobia’s website, seventy-five countries still list homosexuality as a punishable crime.

Of course, the W.H.O. was rather late getting on board with this. Trudeau was pretty laid back about homosexuality as far back as 1967, and the American Psychiatric Association decided in 1973 that being gay wasn’t a mental illness. (If you have time to listen to an hour of fabulous radio, This American Life has a great episode on how that took place).

viernes, 18 de mayo de 2007

Mi casa, tu casa

Una vez pasada la revisión por mi decorador personal (aka. Churri del amor) puedo pasar a presentaros mi casa.

Esta es la entrada. Como véis, no hay espacio para mucho y he tenido que colgar la percha de la caja del automático... Espero no terminar saliendo en las noticias.
La cocina está más que bien, incluso para un piso que midiera el doble. Además, como no me gusta cocinar sólo para mí... tampoco me está haciendo falta más. Eso sí, con el agua que se condensa en la nevera se podría regar las macetas de mi suegra. Bueno, y la lavadora tiene truco: cuando llega al cinco se atranca, y tienes que mover a mano la "rula". La primera vez que la puse no me aclaré muy bien con el cajón del detergente, y cuando acabó ahí seguía el muy jodío.... Pero vamos, por lo demás...

Este es el baño, con espejo a prueba de metrosexuales y bañera olímpica. Bueno, olímpica para uno, que para dos al final siempre resulta complicao... Espero que mi piso definitivo de 1 Euro tenga jacuzzi.


Esta esquina es el salón. La mesa la lámpara y las sillas las compré yo. Los mantelitos a juego con las alfombras también (mi gen G parece que funciona, según el Sr. Skyzos...). Otra duda que me surge es cuánta intimidad dejan estas persianas... porque no me gustaría que me conocieran en el barrio más íntimamente, o que colgaran fotos mías en internet.
Y aquí la cama. Y más persianas de tirillas (menos mal que yo no tengo problemas para dormir con luz... La cama, el colchón y la colcha estaban de rebajas en IKEA...

Y esto es todo. Mis 25 metritos de piso lisboeta. Y ya sabéis, mi casa es tu casa, así que todas las visitas son bienvenidas, siempre que traigáis una botellita de vino (o una caja) y un saco de dormir (al menos hasta que en IKEA-Alfragide traigan el futón verbenero que me quiero comprar...).

martes, 15 de mayo de 2007

Un fin de semana casi perfecto

Una tarde en IKEA-Alfragide, redecorando la República Independiente (y, por el momento, Inexistente) de Nuestra Casa.

Cena romántica con fados (y la Chenoa portuguesa) en el Barrio Alto.

Un paseo en tranvía hasta el centro y ruta fotográfica (y comercial) desde la Praça do Comercio hasta la Igreja do Carmo, esquivando a los vendedores de Hachís (Hash!).

Ascenso a la Alfama (y baño de multitudes en el eléctrico). Merienda para cuatro, pero para dos (queijadas y pasteis de nata). Cena y vino.

Un paseo romántico por la playa. La caza de la Canomori Hispano-Lusa. Comida económica en Cascais. Hechizados por la boca do inferno.

Fotos con o Vasco da Gama. Pasteles con azúcar y canela en Belem. Muchos besos. Muchos abrazos. Muchas caricias.

Y lo único que lo habría podido hacer mejor es que se te hubieran perdido los billetes de vuelta.

Ya te estoy echando de menos, pero nos vemos en quince días.

martes, 8 de mayo de 2007

Juego de Niños II: la Religión


Y aquí va el segundo fragmento de “Juegos de Niños”, de Tom Perrotta. Para mañana prometo un post lisboeta de verdad...


La noche en que se conocieron, hacía poco más de diez años, ni Larry ni su futura esposa habrían ganado ningún premio por ser católicos de estricta observancia. Si se hubieran atenido más a los preceptos de la iglesia en que se habían criado, seguramente Joanie no habría competido en el concurso Miss Pezones del jueves por la noche en Kahlua’s, y Larry –junto con el otro gorila del club, un gigante taciturno al que llamaban “Duke”- seguramente no habría remojado a las cuatro finalistas con cubos de agua helada. (Joanie quedó en un decepcionante segundo puesto, pero eso, como Larry le explicó después de cerrar entre numerosos tragos de tequila, fue porque él era sólo el que las remojaba y no uno de los jueces, los cuales, en su modesta opinión, deberían haberse hecho mirar la puta vista.)

Sin embargo, pese a su sesión de sexo anticonceptivo y prematrimonial (¡aquella misma noche!) –por no mencionar su mutua disposición a cortar por lo sano si se producía el infausto resultado de un embarazo-, tanto Larry como Joanie se consideraban buenos católicos de un modo arraigado e inmutable que tenía menos que ver con la práctica religiosa que con la identidad cultural. Eran católicos igual que eran norteamericanos: les venía de herencia, una forma de ciudadanía que sus padres les habían legado y que ellos a su vez legarían a sus hijos, al margen de si observaban o no las reglas vaticanas sobre temas éticamente conflictivos como el aborto y los concursos con camiseta mojada.

Curioso, si naces en España eres católico, en Israel judío, en Palestina musulmán, hindú en la India, anglicano en Inglaterra, en USA... bueno, allí puedes ser lo que quieras, sino que se lo digan a Richard Gere o Tom Cruise... ¿Algo que añadir, zagales?.

jueves, 3 de mayo de 2007

Juegos de Niños I: la masturbación

Estas semanas me he estado leyendo un libro que me auto-regalé por mi cumpleaños: “Juegos de Niños”, de Tom Perrotta. No es que sea gran cosa (no quiero que nadie se lo lea por mi culpa y luego me venga con que le ha decepcionado...) pero sí quiero aprovechar un par de fragmentos para dos posts. Aquí va el primero.

Aaron se había descubierto el pene. Siempre que tenía un momento libre –cuando estaba viendo la tele o escuchando un cuento-, su mano descendía y la cara se le distendía con aire soñador. Esta nueva afición coincidió con un súbito paso adelante en su adiestramiento defecatorio que le permitió llevar calzoncillos de niño mayor, sólo en casa, durante el día (por la noche, así como en la siesta o en público, seguía necesitando la seguridad del pañal). Debido a que con frecuencia tenía que correr al baño en el último instante, prefería no llevar pantalón encima de la ropa interior, y esta combinación de acceso rápido y cintura elástica propició una suerte de invitación al tacto que al niño le costaba resistir.

Tras haber leído en libros que la masturbación infantil era una actividad común e inofensiva –y con la convicción de que todo individuo tiene un derecho soberano de propiedad sobre su cuerpo-, Todd y Kathy habían decidido no inmiscuirse en las exploraciones del niño. Pero a veces no lo veían claro.

-¿Tú hacías eso de pequeño? –preguntó Kathy. Estaban en el pasillo observando a Aaron, que acariciaba distraído su pequeño órgano viril mientras veía un vídeo de Clifford, el perro pelirrojo.

-Creo que no –dijo Todd. Le costaba recordar cosas concretas de su primera infancia. Cuando lo intentaba, sólo conseguía evocar la cara de su madre mirándolo mientras lo arropaba en la cama, una presencia luminosa, afectuosa y enorme que a veces todavía sentía en los límites de su percepción.

-Yo no, desde luego –repuso Kathy-. Mi madre solía decirme que lo de abajo era sucio y que nunca me lo tocara. Claro que tampoco me dejaba chuparme el dedo gordo. Me lo embadurnaba con una cosa asquerosa para que no me lo chupara por la noche.

¿Algo que añadir, personas del mundo? A mí me hace mucha gracia lo de “lo de abajo es sucio, nunca te lo toques”. A mí una vez me dijeron que no me lo tocara, que se ponía duro y se hacía más grande... Por lo menos no me mintieron.

miércoles, 2 de mayo de 2007

Búsqueda de piso (y II)

Viernes por la tarde, un poco desesperado, bajo a Lisboa a ver dos pisos que, ¡oh maravilla! aún estaban libres.

El primer piso tenía muy buena pinta. La dueña era una mujer que aparentaba unos cuarenta años por teléfono, chapurreaba un poco de español (lo cual se agradece en estas lides). Quedamos a las siete en la puerta de El Corte Inglés (sí, pero esta es sólo una de las muestras de que este país ha sido colonizado en toda regla, ya os contaré, ya).

El segundo piso era un T0 de 25 m2 cerca del Tajo. Vamos a ver, en situaciones desesperadas, uno ve lo que sea. El dueño, que me respondió al mail en inglés, por teléfono sólo hablaba portugués, ¡vaya por-dos! Además, tiene prisa por irse del piso, por lo que me dice que como muy tarde puede quedar a las ocho. ¡¿En el otro extremo de Lisboa, en hora punta un viernes de operación salida y con mi sentido de la orientación?! Vale, nos vemos allí (risa nerviosa por mi parte: no llego ni de coña).

El Corte Inglés de Lisboa está al Norte de la ciudad. Debe quedar muy cerca del aeropuerto, porque allí ya casi se distinguen las caras de los pasajeros por las ventanas de los aviones. Lo juro. La dueña del piso era una cincuentona arrugada como una pasa que olía que tiraba de espaldas a potingues antiarrugas y crema para las manos. Yo estudia español porque muy bueno para cuando ir con amigos a Madrid. Yo gusta mucho de España. ¿De donde eres tú? Murcia, near Alicante. Oh, Alicante, muy, muy bonito Alicante... (Pues empezamos bien, si Alicante es bonito, no me quiero imaginar lo mono que debe ser su piso...)

Antes de ver el piso me advierte: la inquilina actual (a la que se dirige siempre como la doutora, así como yo era el doutor) está aún viviendo allí, por lo que no debo pensar en el piso tal y como lo voy a ver, sino tal y como debería estar. Por eso, decide enseñarme unas fotos. El piso es un T0: una sola estancia que hace las veces de dormitorio, cocina y salón, y un baño separado. El sofá es la cama. Mira qué bonito queda con los estos (cojines de estampado de la abuela). Hay un ventanal inmenso. Este mueble de aquí la chica quitar porque no gustar (hace gesto de desprecio y pone mueca de asco e incomprensión... pero qué menosprecio de la doutora a su buen gusto decorativo-estilístico). Pero muy bonito con lámpara y con esta cosa de aquí que tapa la luz. (La mujer se refería a unos visillos blancos con puntillas la mar de canomoris). Esta lámpara muy bonita, con esto aquí (lámpara canomori con chorreras en los bordes de la pantalla a juego, totaaal, con racimo de uvas de porcelana setentera). El baño todo equipado (creo que se compró los apliques en la misma oferta que María Antonieta, estilo imperio) y cocina tiene todo (la cocina “se esconde” gracias a una puerta plegable).

Claro, uno es muy educado y no sabe lo que se va a encontrar en el otro piso, así que le dice a la Madama (ejem) que no se preocupe, que la llamo en cuanto tome una decisión.

Miro el reloj, son menos veinticinco y aún tengo que llegar al coche, que está en el -2 del Corte Inglés (este -2 es un -2 de verdad y no tiene ventanas, pero claro, es que el ECI es español...) y de allí a Alcántara. Yo le llevo. No, no se moleste, si está aquí al lado... No, no, yo le llevo, no molestia. La mujer se monta en el coche. Antes de darle al contacto saca del bolso un cepillo y se arregla los cuatro pelos rubios, mirándose al retrovisor. Tierra trágame, que no sé dónde meterme. Menos mal que conseguí evitar la risa pellizcándome la entrepierna...

Total, 500 Eus. en plena zona de vorágine de tráfico. Eso sí, con ese piso taaan canomori, me aseguro un par de premios en el certamen Canomori-Varietés-2007.

Al otro piso llegué tarde... pero sólo cinco minutos. Llegué corriendo a la puerta del edificio y el dueño me esperaba mirando por la ventana (era un primero). Veinticinco metros cuadrados de mini piso... Y lo peor es que me gustó. Tenía tarima de madera, el edificio era nuevo, las paredes blancas estaban limpias, aire acondicionado-bomba de calor, todos los electrodomésticos, cocina y baño amplios (considerando el tamaño total del piso, entre los dos yo creo que sumaban más de la mitad: el baño tenía hasta bañera olímpica)... y una única estancia dormitorio salón SIN CAMA. Sólo tenía dos armarios y una mesita de noche. El dueño me dijo que no había problema, que la cama me la pone, que tienen que pintar el suelo, que las persianas las cambian el lunes...

Y lo peor es que me sigue gustando... Según veía el piso (se tarda poco, claro) me imaginaba mis cosas por allí, los complementos más totales de IKEA (aconsejados por mi no menos total Churri del Amor). Y el barrio es tranquilo. Está la filmoteca de Lisboa muy cerca (¿me habrá visto cara de moderno?). Me pilla muy fácil para salir hacia el curro.

Total, que 375 Eus. de mini-piso. Le digo que me lo tengo que pensar. Y me piro.

El sábado estuve llamando a más pisos, pero en todos me decían que, o bien ya estaba alquilado, o bien no lo podían enseñar hasta el lunes, así que dediqué el resto del finde a otros quehaceres, como visitar Cascais, más tranquilo sin todo el jaleo este de la búsqueda de piso.

Y claro, llega el lunes, y uno se piensa que va a ver los pisos a los que llamó el sábado... hasta que le dicen que no, que ya están alquilados, que lo sienten... y se le queda cara de tonto.

Otra vez, a buscar como un loco por internet (Ocasiao, Foro de Erasmus en Lisboa, páginas de inmobiliarias...). Como el finde me lo había pasao entero más solo que la una y más triste que el silencio (de aquí a poco empiezo a hablar solo...) pues empecé a mirar pisos compartidos. Y encontré uno. Llamo. ¿Está libre? Sí. ¿Cuándo puedo verlo? Ahora. Mira qué bien. Pallá voy. El piso está muy cerca de lo más turístico del centro lisboeta. Es un piso compartido por una portuguesa, una alemana y una española. Y va el maricón del chiste, y dice... ¡Hola, soy Shepperdsen! ¿Me abres?. Y la puerta se abre... y dos pisos más arriba, subiendo por la escalera de madera (con mucho encanto=roña, como casi todo en el centro de Lisboa) me encuentro con la versión portuguesa de Lluvia Pérez, que ha cogido unos kilos, por lo que se ha tenido que vestir con la falda de la mesa camilla-parker-bowles y lleva dos años sin depilarse el bigote, porque ella es jipi de toda la vida. Me recibe sonriente. Yo digo que la va a besar clavijo, y le doy la mano. Y eso que a mí las barbas siempre me han molao... pero es que los bigotes...

Jijí, jajá. Que si soy la dueña del piso, que si tal, que si cual, que si libertad (que soy jipi), que si respeto (que soy jipi), que no es un problema que seas gay y que traigas a tu novio cuando quieras (que soy jipi), que si limpieza (¡coño!, ¿no eras jipi?), que si internet es sólo en este cuarto, que no tengo güairles, que si Vanesa ten cuidao que el gorrino se te come el módems...

Total, que 320 Eus. por mini habitación (más pequeña que la que tenía en el planeta murciano, ¡qué hermoso eres! en piso cochambro... digo con encanto, en el centro de la ciudad, en una calle en la que no es que no se pueda aparcar ni encima de las aceras, ¡es que no hay aceras!

Vamos que no, que me vuelvo a Oeiras con el rabo entre las piernas. Me encuentro con mi jefa, que me había estado buscando para hablar del trabajo (¡vaya! y casualmente yo no estaba). A todo esto, el del mini-piso mandándome mails con las fotos del piso, que yo creo que las había trucado, porque cada vez se me antojaba más grande y espacioso el loft. Y yo sin piso y sin ganas de seguir viviendo en el campus, rodeado de vacas y caballos y demás vegetaçao salvaje.

Total, que le digo que sí al del mini-piso, que estoy harto de perder el tiempo llamando a anuncios de pisos que están ocupados y de ver a canomoris y mujures-bigotudas.

Ale, a criticar... pero que sepáis que me ha dicho que estuvieron durmiendo en ese piso cuatro personas durante una semana (su novia, los padres de su novia y él), que sólo hace falta organizarse un poco... Además, si hacemos caso a los datos de las últimas manifestaciones en Madrid y otros puntos de la península, en 25 m2 se pueden meter fácilmente unas... déjame calcular... y me llevo tres... y un veinte por ciento arriba... unas 200 personas, decentes, claro está. Así que ná, la próxima manifestación del Foro de la Familia la montamos en mi piso de Lisboa. ¡Que se venga una jartá de murcianas! ¡Que el tranvía os deja mu cerca de la puerta! Miradlo, que lo mismo hay buena conexión...